Saturday, March 03, 2007

adios

Esa noche despues de ayudarle con sus maletas, fuimos a recoger unos libros a casa de otros extranjeros, estuvimos ahi un rato platicando. Ella se despidio e intercambio correos electronicos, despues fuimos a mi departamento a dejar unas cosas para poder ir a tomar una chela juntos en un café en la avenida principal, pero, en las escaleras de mi edificio en el tercer piso en medio de lo oscuro nos encontramos a un hombre de la calle, al principio nos asustó pero despúes nos pidio permiso para quedarse a dormir ahi en el piso a un lado de los escalones porque la lluvia lo habia atrapado y no podia llegar a su casa, -eso nos dijo-, claro, su olor fuerte a orines lo delataba porque esa casa de la que hablaba no existia: Ella se quedó con el paraguas y los ojos bien abiertos porque no entendia que estaba pasando, yo solamente le dije con tono de desaire y mandandolo al diablo mientras me alejaba de él: yo no sé! yo no sé!... mientras saliamos del edificio a tomar la cerveza pensamos en lo desdichado que podria ser no tener hogar// mi sobrevivencia me decia votarlo, pero mi lado humano no podia votarlo del edificio, aunque quisiera. Al llegar al bar nos dimos cuenta que estaba cerrado. ya era noche y su vuelo a philadelphia salia a las seis de la mañana/ caminamos entre la lluvia bajo un solo paraguas/ la despedí/ en su puerta con un fuerte abrazo/sentí un hoyo en el pecho y nos dijimos adios...
Aunque hubo dos tormentas esa noche como solo puede haber en Jalisco/ en la madrugada mientras oía los relampagos y el fuerte viento sentí la necesidad de darle las gracias a dios por estar en otra ciudad y tener un techo y cobija que me cubran **, ella se fué y me dejó vagando solo por la ciudad, yo regresé a Tijuana tres meses despues, aunque sé que nos vamos a encontrar en otra ciudad la voy a extrañar grande.

**"La realidad sólo ejerce su presión sobre las necesidades de la vida cotidiana: la necesidad de comer y de beber, de vestirse y tener un techo". pp. 197. -1984. George Orwell.